El bowspring es una nueva modalidad de yoga que trabaja para cuidar a la vez el cuerpo, mente y emociones. Lo novedoso es que se basa en un sistema isométrico de ejercicios pensado en 10 pasos que activan la parte posterior y delantera del organismo. La zona facial también está incluida en la rutina.
Recuerda que los ejercicios isométricos son los que aplican tensión muscular, pero que no contraen ni extienden los músculos. Por tanto, con est actividad combinas lo mejor de practicar deportes con el yoga y sus beneficios relacionados con la relajación de la cabeza y la liberación de las emociones. Así podemos reducir el estrés y fomentar pensamientos más saludables. De hecho, ese era uno de los objetivos de Desi Springer y John Friend, quienes idearon esta práctica en 2013 para unir cerebro y corazón en una sola disciplina.
El entrenamiento persigue conseguir una correcta alineación de la espalda al trabajar en el organismo por zonas las cuales se dividen en la corona, constituida por el cuello y cabeza, el tronco, que engloba el abdomen y espalda baja, las alas, que es todo lo que va desde hombros a manos, el corazón, y las raíces, que abarca desde las caderas hasta los pies. Los creadores pretenden crear más conciencia y atención sobre nuestras partes corporales.
Otros de los beneficios de este método es que genera flexibilidad, ligereza y agilidad, gracias a que también estás ejercitándote. Esto desde el punto físico, pero también ayuda a liberar emociones, las posiciones que se usan al practicarlo presionan sobre el pecho, la garganta, el abdomen y el suelo pélvico, consiguiendo soltar la tensión que se acumula en estas áreas en momentos de estrés y ansiedad.
¿Te animas a practicarlo?